El 40% de los profesores nuevos abandona la profesión al quinto año

13 de Enero de 2014
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Investigadores del CIAE expusieron en el Senado sobre proyecto de carrera docente inicial.

En días en los que se vive una crucial discusión sobre el proyecto de ley sobre carrera docente inicial, académicos del Centro de Investigación Avanzada en Educación de la U. de Chile (CIAE) alertaron sobre las condiciones laborales de los profesores. Según datos del investigador Juan Pablo Valenzuela, alrededor del 40% de los docentes abandona las aulas al cabo del quinto año de ejercicio, dato que incluye a quienes se desempeñan en colegios particulares.

Según una investigación de Valenzuela y Sevilla, el 22% de los profesores que ingresaron a la profesión en el año 2000, no se encontraba haciendo clases dos años después. La situación se vuelve más crítica al noveno año, cuando el 56% de los docentes de esa cohorte había abandonado.

En el caso de la generación que ingresó a la docencia en el año 2004, el 23% había abandonado al segundo año; el 30% al tercero y el 40% al quinto año. Entre quienes comenzaron a ejercer en 2007, un tercio había desertado ya al segundo año.

Según los datos entregados por Valenzuela, existe una mayor tasa de retiro en hombres y entre profesores de enseñanza media.

El investigador presentó estos datos en la sesión de la Comisión de Educación del Senado en la que se aprobó, en general, el proyecto de Carrera Docente Inicial el miércoles 8 enero. A la sesión, asistieron, además, la directora académica del CIAE, Alejandra Mizala; y la Premio Nacional de Educación 2013 e investigadora del CIAE, Beatrice Avalos.

Según Valenzuela, los problemas estructurales de la profesión explican el abandono temprano de los docentes. Ellos son las precarias condiciones laborales y el débil liderazgo escolar. Entre las precarias condiciones laborales, figuran el clima de trabajo y con los estudiantes, la actitud de los colegas, el bajo apoyo de la comunidad y de los directivos, la cultura escolar y el escaso tiempo disponible. “Son más importantes las condiciones sociales de trabajo que las materiales o de infraestructura”, dijo el experto del CIAE.

Añadió que la poca efectividad de los directores sería la razón principal del abandono temprano de la profesión, según algunas investigaciones. “Estos afectan la cultura de la escuela, la autonomía de los docentes, el tipo de liderazgo y apoyo que se presta a los docentes en su trabajo, así como el desarrollo de estrategias de cooperación entre docentes y con directivos”, dijo Valenzuela.

Según el investigador, aumentar las remuneraciones es clave para enfrentar el abandono y aumentar el atractivo de la profesión, ya que “existe una evidencia sistemática de una importante brecha en remuneraciones promedio de profesionales de pedagogía versus el resto de los profesionales chilenos”. La brecha es mayor entre los profesores de más años de servicio.

Por su parte, la directora académica del CIAE, Alejandra Mizala indicó que el proyecto actual no apunta a políticas generales que permitirían cambiar el comportamiento de la mayoría de los docentes. Añadió que urge discutir ley sobre carrera docente que motive a todos los docentes por mejorar sus competencias pedagógicas y disciplinarias y que de verdad premie el desempeño.

Para Mizala, las propuestas para cambiar el estatus de la profesión docente debiesen ser mejorar la calidad de la formación de las instituciones de educación superior para compensar las desventajas de origen de los alumnos; cambiar la composición de los estudiantes; y una carrera profesional que busque no sólo atraer a los mejores a la docencia sino también retenerlos.

Prueba Inicia

La Premio Nacional de Educación, Beatrice Avalos llamó a repensar la prueba Inicia antes de hacerla obligatoria y propuso, en cambio, aplicar una prueba similar a los estudiantes de Pedagogía, en la mitad de su carrera; y una evaluación tipo portafolio cuando comienzan a ejercer.

Según Avalos, la prueba Inicia no mide adecuadamente cómo se desempeñará en el aula un docente. “La prueba propuesta mide conocimientos disciplinarios y pedagógicos. Es dudoso examinar capacidades pedagógicas con una pregunta de una sola respuesta. En el escenario actual, no hay espacio para reflexionar acerca de las situaciones que se presentan en el aula”, dijo. En cambio, una prueba similar a Inicia a la mitad de la carrera permitiría mejorar las debilidades antes del egreso, mientras una evaluación tipo portafolio cuando se empieza a ejercer la docencia mediría la efectividad de los maestros en el aula.

Sobre el mismo punto, la experta del CIAE indicó que la idea del proyecto de ley de dar una bonificación monetaria a quienes logran mejores resultados en la prueba Inicia o en la PSU, implicar dar más remuneración a alguien “que no se ha probado en al aula”. Agregó que esa idea viola los principios básicos de justicia social, al introducir desigualdad al inicio de la profesión entre aquellos que obtuvieron mejor puntaje PSU y quiénes no. “Comienzan a enseñar con una diferencia de sueldo, sin saber cómo lo harán en el aula”, explicó.


Fuente: Comunicaciones CIAE

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