La habilidad de comprender textos tiene un fuerte impacto en la vida de los individuos en una sociedad como la nuestra, pues los textos hacen parte de las interacciones entre las personas, la forma como actúan y se organizan en las más diferentes situaciones. Así lo señaló Alina Spinillo, académica de la Universidad Federal de Pernambuco, Brasil, quien estuvo de visita en el Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile.

La experta, quien es psicóloga y Doctora en Psicología del Desarrollo por la Universidad de Oxford, y tiene un posdoctorado de la Universidad de Sussex, Inglaterra, colabora con el CIAE en el Proyecto Fondecyt "Efectos de la enseñanza explícita y contextualizada de la gramática y el léxico en la calidad de la escritura de estudiantes de 6° Básico" y se espera que colabore en otro sobre comprensión lectora en niños pequeños. Además, se reunió con los distintos investigadores que trabajan en el área de Enseñanza y Aprendizaje del Lenguaje.

En su visita, Alina Spinillo explicó cómo se produce la comprensión de textos y por qué es importante para los docentes desarrollarla: “Comprendemos un texto a través de la construcción de un modelo mental, de la formación de conexiones entre las informaciones contenidas en el texto y, de las conexiones entre esas informaciones y nuestro conocimiento previo relevante que es accionado cuando entramos en contacto con el texto”.

En otras palabras, en la comprensión de un texto, el lector construye activamente significados, a partir de la integración de informaciones textuales entre sí y con los conocimientos previos relevantes. Por eso, es un proceso inferencial por excelencia. “La formulación de inferencias es un proceso de alto nivel, responsable por la formación de sentidos y de una representación mental coherente del texto, que permite rescatar informaciones no explícitas en el texto y que implica la construcción de nuevas proposiciones a partir de otras ya dadas, sean éstas proporcionadas por el texto o por el conocimiento del mundo del lector”, explicó.

Sin embargo, precisó que la habilidad de la comprensión lectora se suele relacionar con el proceso de alfabetización y que, por ello, existe la creencia de que basta con leer, para desarrollarla. “Aprender a comprender textos es un aprendizaje que no está garantizado con el aprendizaje de la lengua escrita (alfabetización). Los docentes tienen el desafío de desarrollar esta habilidad”, indicó.

En ese sentido, presentó dos estudios sobre cómo desarrollar esta habilidad en los niños que presentan dificultades en esta área.

El primer estudio mostró diversas situaciones de lectura que pueden facilitar el establecimiento de inferencias en niños de escuelas públicas de Recife.  Y concluyó que cuando los niños se enfrentan a textos cuya lectura es interrumpida por preguntas que requieren extraer inferencias y dar explicaciones, tienen más facilidad para comprender los textos.

El segundo estudio consistió en una experiencia de enseñanza basada en actividades que promovieron el establecimiento de inferencias y la toma de conciencia de los alumnos respecto de su propio proceso inferencial. Estas actividades llevaron a los alumnos a reflexionar sobre la integración de informaciones intra y extratextuales, permitiendo la interacción entre las informaciones vinculadas al texto y a su conocimiento del mundo.

“Es necesario pensar en situaciones alternativas de lectura que puedan favorecer la comprensión del lector, sobre todo de los niños que presentan dificultades. Estas situaciones alternativas  potencian la comprensión y el desarrollo de formas apropiadas del alumno para tratar con la información intra y extratextual”, explicó la experta.

Añadió, por ejemplo, que mientras la lectura interrumpida con preguntas inferenciales facilita la comprensión de textos, las preguntas de explicación ayudan en la precisión de las respuestas.

Por ejemplo, después de que los niños responden preguntas sobre el texto, el o la profesora pueden preguntar ‘¿cómo usted descubrió eso?’, ‘¿de dónde sacó esa información’? o ‘¿eso lo dedujo del texto o de alguna parte fuera del texto?’. “Las preguntas tienen el doble papel de evaluar y de promover la comprensión, porque centralizan en lo que es relevante”, detalló.