El Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE) es una evaluación estandarizada y con enfoque curricular dirigida por el Laboratorio LLECE de la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago) y aplicada para medir el aprendizaje de los/las estudiantes. Su objetivo es la obtención de información precisa acerca de los aprendizajes de estudiantes de estos países en 3° y 6° y los factores que explican sus avances o retrocesos. La quinta versión está prevista para 2025.
En ese contexto, se realizó en Quito, los días 24 y 25 de enero, la 56ª Reunión de Coordinadores Nacionales del LLECE para acordar el proceso de implementación del ERCE 2025. Este evento fue organizado por el Laboratorio LLECE de la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago) junto al Instituto Nacional de Evaluación Educativa de Ecuador (INEVAL). En dicho encuentro participaron autoridades ecuatorianas y los coordinadores nacionales de cada país miembro del Laboratorio.
En la ocasión, la directora del IE e investigadora del CIAE, Carmen Sotomayor, presentó los primeros resultados del estudio de análisis curricular realizado por el IE para 19 países de AL y el Caribe que participan en ERCE. El análisis curricular se llevó a cabo en 3° y 6° grado en las áreas de lectura, escritura, matemáticas y ciencias. “El objetivo del análisis curricular es aportar al diseño y construcción de los ítemes de ERCE en 3º y 6º en las disciplinas de lenguaje, escritura, matemática y ciencias y tener una visión de los currículos de América Latina y el Caribe, es decir, de lo que se espera que aprendan los niños/as”, explica la profesora Sotomayor, quien dirige este análisis curricular por parte del equipo del IE.
En la reunión, la profesora Sotomayor explicó la metodología del análisis curricular y los resultados de la primera consulta a los países para validar la fase cualitativa del análisis. La metodología utilizada fue mixta e incluyó una fase cualitativa, donde se exploraron y describieron la presencia de dominios y procesos cognitivos o indicadores específicos; y una etapa cuantitativa, donde se cuantificó la frecuencia de las categorías para construir las tablas de especificaciones de la prueba ERCE.
Carmen Sotomayor, además, adelantó los primeros resultados del análisis cuantitativo del estudio, los que dieron cuenta de que todas las dimensiones evaluadas en ERCE 2019 aparecen en el análisis actual en, al menos, el 70% de los países, lo cual permitiría que la evaluación del 2025 sea comparable con ERCE 2019.
“El estudio ERCE 2025 evidenciará el nivel de logro educativo de los estudiantes de la región, así como su evolución desde la última medición en 2019 y tras la pandemia de COVID-19. Forma parte de los esfuerzos de la región para robustecer los mecanismos de información necesarios para dar respuesta a los grandes desafíos que enfrenta la región en materia educativa”, dijo en la ocasión Claudia Uribe, directora de la OREALC/UNESCO Santiago, presente en el encuentro en Quito.
A su vez, Susana Araujo, directora ejecutiva del INEVAL, señaló que “para Ecuador es fundamental participar nuevamente en este estudio, que promueve el fortalecimiento de capacidades locales en el procesamiento, análisis y reporte de las evaluaciones a gran escala”. Asimismo, aseguró que “es claro que los logros de aprendizaje no dependen exclusivamente de la nota adquirida por el estudiante, sino de otros factores asociados a la calidad de la educación. Por ello es pertinente mantener la frecuencia de esta evaluación con el objetivo de establecer una trazabilidad en los resultados y generar medidas de política pública”.