El proyecto, que será financiado por FONDECYT, busca entender cómo los niños aprenden y usan el lenguaje para expresar generalizaciones (por ejemplo, los pájaros vuelan y las pelotas son redondas) y si su uso se relaciona con beneficios cognitivos, como la memorización y transferencia de información nueva.
Según la experta, este tipo de lenguaje podría ayudar en la forma de recodar y procesar información nueva. Por ejemplo, los niños tienden a tener dificultad para comprender las inferencias (significados no explícitos en los textos), pero cuando éstas están ancladas en expresiones genéricas, les resulta más fácil comprenderlas y recordarlas, argumenta.
Las generalizaciones permiten que los niños aprendan sobre el mundo. Por ejemplo, cuando una madre le dice a un niño no te acerques a la estufa porque las estufas queman, está comunicando que las estufas en general (y no sólo la estufa a la que el niño no debe acercarse) queman y son peligrosas. Por lo tanto, el lenguaje genérico permite pensar, hablar y referirnos a lo que no se experimenta de forma directa (no se necesita estar frente a un león para saber que son feroces y por lo tanto peligrosos). Al ser vehículo de abstracciones conceptuales el lenguaje genérico es frecuente en textos expositivos y materias escolares.
Investigaciones en Estados Unidos afirman que a partir de los 2 años y medio los niños comienzan a distinguir los enunciados genéricos de los concretos. Sin embargo, según Carolina, la idea de que el niño generalice o haga abstracciones a través del lenguaje desde tan pequeño es polémica porque se piensa que el razonamiento de los niños es concreto y se da en el aquí y el ahora. En el área de la educación existe la idea generalizada de que se aprende mejor a través de conceptos específicos, pero la verdad es que no se ha investigado el potencial que tiene entregar la información de forma genérica, sostiene.
El objetivo de este proyecto es investigar de qué manera este tipo de lenguaje apoya la instrucción y si incide en la capacidad de razonamiento, comprensión y memorización de nuevos conceptos. Debemos investigar cómo interactúan estos dos tipos de conocimiento, el específico y el genérico, en qué cantidades involucrarlos para que ayude a retener la información y cuándo es más útil empezar a usarlos. Si encontramos efectos significativos, estos resultados podrían ayudar a los profesores a preparar sus clases de determinada manera y a los alumnos a resolver mejor los problemas y a transferir de forma más fácil los conocimientos.
Para la lingüista, aún es un misterio saber cómo los niños aprenden este tipo de lenguaje y cuándo adquieren la habilidad de entender los enunciados genéricos. El lenguaje genérico no tiene un marcador lingüístico explícito. Es posible marcar si un sustantivo es plural o singular, si es femenino o masculino, pero esto no es posible de realizar con los conceptos genéricos o concretos. El niño debe integrar información lingüística (artículos, tiempo verbal, aspecto) y extralingüística (situación contextual, conocimiento del mundo, intención del hablante) para identificar las oraciones genéricas, explica.
Para hacer investigación de calidad se necesitan muchos recursos
Este proyecto será financiado por FONDECYT a través del Concurso Iniciación a la Investigación 2012, el cual busca apoyar iniciativas de investigación científica o tecnológica de investigadores con grado académico de Doctor que inician su carrera como investigadores. Un trabajo que, según Carolina Holtheuer, para que sea de calidad, requiere de muchos recursos.
El Fondecyt me permite tener fondos para asistencia técnica y recopilación de datos. Este tipo de investigación, que implica trabajar con niños de 2 a 7 años, consume mucho tiempo y recursos, ya que los datos se deben obtener de cada niño que participa. El proyecto contempla el uso de datos de interacciones espontáneas de los niños con sus padres además de datos experimentales que deben obtenerse de muestras grandes para que los resultados sean generalizables por lo que necesito ayudantes que puedan trabajar con niños recogiendo datos y que además puedan codificar y ayudar en el análisis de datos. El Fondecyt además, le permitirá presentar los resultados en congresos y trabajar con investigadores extranjeros, lo que es muy importante para mejorar su trabajo ya que actualmente la mayor parte de la investigación en psicolingüística se hace en otros países y por lo tanto los expertos se encuentran en el exterior.