Una de las prioridades del Estado es fortalecer el nivel de Educación Parvularia, así como el de los equipos pedagógicos que trabajan dentro de las escuelas. Para este objetivo, en términos de política pública y dentro de la reforma educacional para la Educación Parvularia, se están desplegando iniciativas como la creación de la Subsecretaría de Educación Parvularia, la implementación del Marco para la Buena Enseñanza y la integración de la Educación Parvularia en la evaluación y orientación que efectúa la Agencia de Calidad en los establecimientos.
Sin embargo, el proceso de transición vivenciado por los sujetos entre la Educación Parvularia y la Educación Básica recién comienza a ser explorado por la política pública. El tránsito de una a otra es un periodo crítico para los procesos de aprendizajes de niños y niñas, pues les demanda desarrollar estrategias para desenvolverse en nuevas situaciones en las que son partícipes activos y constructores de realidades. La evidencia internacional señala que una transición positiva puede contribuir a un mejor involucramiento posterior del niño en la sociedad.
El seminario “Transiciones Educativas: Juego, Agencia y Autorregulación”, organizado por el Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile, que se realizó los días 22 y 23 de marzo de 2016, abordó el estado actual de las políticas públicas para la infancia, tanto en Chile como en el extranjero; la importancia del juego como medio de aprendizaje; y analizó distintas prácticas pedagógicas en primera infancia en los ciclos educativos.
El seminario contó con la participación de Kristiina Kumpulainen, directora del Playful Learning Centre, Universidad de Helsinki, Finlandia; del Dr. John Potter, del Institute of Education, University College London; y de Rob Yates, investigador del Center for New Designs in Learning & Scholarship de la Universidad de Georgetown, Estados Unidos. Además, participaron de él Cristina Schmitt, investigadora de MSU Language Acquisition Lab de Michigan State University, Estados Unidos; y David Whitebread, director del PEDAL Centre de la Universidad de Cambridge, Inglaterra.
En la ocasión, las investigadoras del CIAE, Daniela Jadue y Gabriela Báez, junto con la investigadora de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Elísabet Díaz, expusieron los resultados preliminares de un estudio financiado por el Noveno Concurso Fonide del Ministerio de Educación, que analizó y evaluó las características de la transición y articulación entre la Educación Parvularia y la Pedagogía General Básica, bajo un enfoque que considera las prácticas de aula desde las perspectivas de niñas y niños y de los equipos pedagógicos dentro de los centros educativos.
A través de las presentaciones dictadas por los académicos y autoridades, se debatió constantemente el problema de la pertinencia, y eficacia de los métodos y políticas educacionales implementadas tanto en Chile como en el mundo para la promoción de aprendizajes significativos en los contextos educacionales. Actualmente, se está estresando el foco en aumentar las exigencias academicistas desde muy temprana edad, implementando metodologías y promoción de aprendizajes formales desde la Educación Parvularia, medida que no toma en consideración los avances en investigación sobre los procesos de aprendizaje y desarrollo del ser humano. Ante esto, todos los expositores estuvieron de acuerdo en que, especialmente debido al contexto mundial actual, lo más relevante para la educación es promover y crear espacios para los niños que les permitan desarrollar habilidades para ejercer agencia en su aprendizaje y transformar el ambiente que los rodea.
Los expositores coincidieron en que, para ello, se hace crucial reflexionar sobre el rol del juego en las infancias de hoy para así reposicionar la pedagogía lúdica, centrada en el niño, sus intereses, necesidades y motivaciones. Sólo así se promoverá el desarrollo de habilidades sociales, inteligencia emocional y, por sobre todo, la creatividad, que permitirá a niños y jóvenes desenvolverse en la sociedad de hoy asumiendo su responsabilidad como ciudadanos y la responsabilidad que esto conlleva en la construcción de un mundo futuro. El seminario concluyó que es imperioso reconocer la importancia de prácticas pedagógicas agénticas como el juego y la performance, incluir en ellas las nuevas tecnologías (al servicio de la pedagogía), y posicionarse pedagógicamente desde una mirada comprensiva y práctica del enfoque de derechos de los niños.
En esta reseña acerca del seminario, les mostramos los principales aportes de cada uno de los expositores.