En un momento clave para fortalecer la formación de los futuros profesores en Chile, el Ministerio de Educación, el Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile (CIAE), la Fundación por un Chile que Lee y ProLeer han dado a conocer un Manifiesto que busca mejorar la enseñanza de la lectura y la escritura desde los primeros años escolares. Junto a esto, también presentaron una propuesta de Programa para el curso “Didáctica de la lectura y escritura inicial”.

En un hito clave para el fortalecimiento de la formación inicial docente en Chile, el Ministerio de Educación, el Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile (CIAE), la red ProLEER y la Fundación por un Chile que Lee, han hecho público un Manifiesto por una formación docente para la lectura y escritura inicial, junto con una propuesta de Programa para el curso “Didáctica de la lectura y escritura inicial”. Esta iniciativa constituye una respuesta articulada y multisectorial ante el desafío urgente de mejorar la enseñanza de la lectura y escritura en Chile, sobre todo en los primeros años escolares.
Los dos documentos presentados surgen del trabajo colaborativo entre formadoras de docentes, investigadoras, asesoras de fundaciones educativas, responsables de políticas públicas, diseñadoras de programas y profesoras de aula. Todas ellas han compartido una mirada común, situada y basada en evidencia en torno a la enseñanza de la lectura y la escritura inicial. Durante más de dos años, este grupo ha sostenido un proceso de reflexión profunda e intercambio de saberes que ha dado origen a propuestas concretas, rigurosamente fundamentadas y orientadas a transformar las prácticas de formación inicial docente en el país. “Lo más importante de este Manifiesto es que se trata de un acuerdo entre universidades muy diversas, fundaciones y docentes. Se han reunido en esta iniciativa, académicas que preparan profesores, formadoras que trabajan apoyando a las escuelas y docentes en ejercicio. Esto puede generar una sinergia muy potente y necesaria, porque es un acuerdo transversal”, explica Carmen Sotomayor, investigadora del CIAE de la U. de Chile.
Uno de los aspectos más relevantes de este proceso ha sido su implementación piloto mediante el taller Formadoras por la lectura y escritura. Esta experiencia ha sido desarrollada en el marco del Taller de Formadoras, como parte de la red Por un Chile que Lee, con el respaldo de ProLEER y del Ministerio de Educación de Chile. El trabajo conjunto ha permitido vincular teoría y práctica, ofreciendo una base sólida para fortalecer la formación docente desde una perspectiva inclusiva y contextualizada.
Leer, escribir, transformar: principios para una nueva formación docente
El manifiesto pone énfasis en el derecho de todos los niños y niñas a aprender a leer y escribir en contextos significativos y equitativos, sostenidos por docentes altamente preparados. Entre sus postulados centrales, se plantea la necesidad de incorporar un curso específico sobre didáctica de la lectura y escritura inicial en las mallas curriculares de Pedagogía en Educación Básica, y se destaca la urgencia de una formación práctica basada en evidencia, que articule saberes teóricos, metodológicos y pedagógicos en contextos reales de enseñanza.
“El manifiesto es un documento muy relevante, porque allí se expresan diez acuerdos fundamentales de lo que se debe considerar en la formación inicial de docentes de educación básica y educación parvularia para la enseñanza de la lectura y escritura inicial”, explica Carmen Sotomayor. Entre estos acuerdos, destaca la lectura y la escritura como llaves del desarrollo personal y social; la importancia del desarrollo del lenguaje desde la primera infancia; y la necesidad de una educación con mayor justicia educativa. Asimismo, se releva el carácter decisivo de primero básico, la enseñanza explícita del código escrito, y el rol de la oralidad en la Educación Parvularia. El texto propone integrar lectura y escritura desde el inicio, formar con base en evidencia, ubicar la didáctica específica en la malla curricular y orientar la formación hacia la práctica en contextos reales.
Integración de la alfabetización inicial en las mallas curriculares
A partir de esta visión, el Programa publicado propone una estructura curricular coherente, sustentada en los estándares de la formación inicial docente y en las prácticas esenciales para el aprendizaje de la lectura, la escritura y la oralidad. Con un diseño metodológico centrado en el ciclo de aprendizaje de la práctica, el programa ofrece lineamientos claros para formar docentes capaces de planificar, implementar y evaluar experiencias de aprendizaje inclusivas, culturalmente pertinentes y con alto potencial transformador.
En esa línea, este programa propone ocupar una posición avanzada dentro de la malla curricular, lo que permitirá que las y los profesores en formación cuenten con los conocimientos disciplinares, pedagógicos y prácticos necesarios para tomar decisiones pedagógicas de manera flexible y reflexionar críticamente sobre su práctica. Así el documento presenta dos propuestas que ejemplifican posibles trayectorias formativas para el área de lenguaje, orientadas a promover un desarrollo progresivo de conocimientos y habilidades específicas relacionadas con la lectura y escritura inicial.
Universidad, escuela y políticas públicas en diálogo
Uno de los aspectos más relevantes de este proceso ha sido implementación piloto de este programa, a través del denominado taller de Formadoras por la lectura y escritura inicial, en el cual académicas de diversas universidades del país han comenzado a incorporar este programa en sus cursos. Entre ellas, la Dra. Andrea Bustos, académica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV). Integrante activa del Taller de Formadoras, Bustos, está aplicando el programa en sus clases del primer semestre de 2025, en la carrera de Pedagogía en Educación Básica de la PUCV.
“La experiencia de implementación ha sido especialmente valiosa para reflexionar sobre las necesidades de formación, la selección de repertorios para su puesta en práctica, y la importancia de contar con una visión integral de las líneas formativas vinculadas a la enseñanza de la lectura y la escritura en los niveles iniciales, así como su proyección hacia cursos superiores. Escuchar a otras formadoras, tanto del ámbito universitario como de fundaciones, permite pensar colectivamente un desafío compartido, que presenta complejidades similares en distintos contextos”, señaló Andrea Bustos, académica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
“Resolver la tensión entre una formación sólida en fundamentos teóricos y una preparación pertinente para la práctica es una tarea que aún tenemos por delante. Por eso, me pareció especialmente interesante participar en esta experiencia pionera, que se atreve a abrir nuestras decisiones formativas al escrutinio compartido, discutiendo de manera crítica los procedimientos evaluativos, las muestras de desempeño y las lógicas de las actividades que desarrollamos en nuestras clases”, agregó la académica de la PUCV.
El trabajo del Taller de Formadoras ya ha comenzado a incidir en espacios de política pública. Tras una primera reunión con el Ministerio de Educación, que valoró positivamente la propuesta, se proyectan encuentros con organismos clave como CONFAUCE y la CNA. Asimismo, se están planificando seminarios de difusión en distintas regiones del país —incluyendo una próxima actividad en Magallanes, donde la Dra. Bustos será una de las expositoras principales— para compartir los fundamentos teóricos, la experiencia de implementación y los aprendizajes del proceso.
La publicación del manifiesto y el programa representa un paso significativo hacia una formación docente más robusta, práctica y contextualizada. En palabras de quienes lideran esta iniciativa, “leer y escribir no es solo un acto técnico: es una llave de acceso a la participación social y a la vida democrática. Por ello, enseñar a enseñar lectura y escritura inicial es, hoy más que nunca, una responsabilidad colectiva que no puede esperar”.